Sima del Fraile, Cifuentes. Doble instalación. 20 de julio de 2023.


Pepe Serrano

El jueves 20 de julio de 2023 por la tarde, que remitió un poco el calor, quedamos en el local del club en Azuqueca para salir a la Sima del Fraile de Cifuentes y que muchos de los nuevos de Viana de este año, tocaran «cueva» por primera vez.

Los asistentes éramos  Ali, Jesús Martín, Pedro, y el que suscribe  como «monitores» (técnicos) y Juanma, Alejandro, Jorge y Carmen como «nóveles» que por fin, y después de múltiples jornadas de duro entrenamiento en el espeleódromo del Pabellón Ciudad de Azuqueca. No podemos olvidarnos de Jesús García, nuestro ángel de la guarda, que nos esperaba a la salida de la sima con una neverita fría.

Elegimos la Sima del Fraile para la ocasión, por su sencillez técnica y por la fabulosa instalación (doble vía en químicos) que nuestro propio club realizó ya hace años. Preparamos en el local el material de instalación necesario para montar las dos vías y a Cifuentes.

A las 5 de la tarde estábamos ya en la boca de la sima. Entro Alicia la primera montando una de las dos vías. Tras ella, Jorge y yo, montando la otra. Por detrás venían apretando Pedro y Alejandro, seguidos de Jesús Martín y Carmen. Ya en cola, les seguía Juanma.

Pedro dándole a Alejandro la ayuda y apoyo necesarios para bajar con seguridad.

Una vez abajo del P45, pasamanos descendente en rampa hacia el pasamanos de acceso del P23. En la cabecera del P23, un poco de simpático tumulto: «¡Quítame el codo del ojo¡, ¡Porfa, esa rodilla la tengo clavada en los riñones! y frases similares.»

 

Pedro y Alejandro en el Pasamanos «Rampa-P23»

Pedro en la cabecera del P23

Según bajan los asistentes, iban yendo a la zona de «los Corales«, fin de la cavidad en dirección noreste. Desde allí, de vuelta a visitar la galería de «las Charcas», donde por supuesto, en estiaje, como estamos, no había ninguna charca.

Carmen y Jesús Martín, de camino a «los Corales»

Jorge en el pasamanos de acceso al P23

Juanma haciendo cola para el ascenso.

Después de risas múltiples e hidratarnos un poco con abundante agua calentorra, que nos dio la vida, comenzamos el ascenso.

Alicia de subida en el primer fraccionamiento del P23

 

Jorge con Alicia, dándolo todo en la subida del P23.

Alejandro y yo en el P45, de subida.

Según íbamos saliendo, Jesús García nos fue agasajando con una cerveza helada (¡no os lo podéis imaginar! salíamos con la boca estropajosa), que en mi caso fueron dos.

Desde allí nos fuimos a la terracita de Cifuentes, la que está junto al manantial, y más cervecitas con ración. Después todos a casa con gran subidón.

Pepe Serrano

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